Hoy nos dirigimos a ustedes para contarles que el gobierno nacional quiere implementar el operativo nacional Aprender 2016, con el cual pretenden evaluar a sus hijos, nuestros alumnos, para saber según sus dichos, cuál es la verdadera situación de la educación.
Nosotros denunciamos que la educación está en problemas y que éstos se profundizan año tras año, a pesar de la resistencia de los propios docentes para que ello ocurra. Pero no coincidimos con las causas de dichos problemas.
Los docentes desconfiamos de las verdaderas intenciones de esta evaluación.
En primer lugar, porque es un operativo donde los docentes nunca fuimos consultados. Y los docentes tenemos mucho qué decir como partícipes del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Primero abandonar, después estigmatizar, por último discriminar
Les queremos contar, que desde hace años, las distintas gestiones que pasaron por el Estado, miraron para otro lado y desfinanciaron la escuela pública.
Fueron veintitrés años de reformas educativas que hemos soportado dando clases igual, enseñando en la adversidad, incluyendo a todos los alumnos que la escuela privada expulsa.
Primero instalaron entre nosotros, la falsa idea de que la educación pública se divide en escuelas de gestión estatal y escuelas de gestión privada y con eso no hicieron otra cosa que dividir y achicar los aportes públicos para las escuelas estatales que son las verdaderas escuelas públicas. Eso trajo como resultado establecimientos con problemas de infraestructura, falta de aulas, docentes mal pagos, sobrecargados de cargos o corriendo de escuela en escuela, con lógicos problemas de salud y sin tiempo para capacitarse.
Aún así, los ataques a la escuela pública y a los docentes, no sólo no cesaron sino que se intensificaron. Ahora, los responsables de éstas políticas, se niegan a ver desde sus inicios la película que nos trajo a esta situación. Quieren ver la foto del final. Y quieren que la culpa recaiga en los docentes. Por eso no nos consultaron, por eso la consulta es externa, viene desde afuera y desde arriba.
Su pretensión es generar información sobre las escuelas para descargar la responsabilidad de la situación de la educación en las estudiantes, docentes y familias, desligando al Estado de su rol de garante de derechos. Así buscan justificar medidas de ajuste.
Pero, el verdadero objetivo, es seguir desentendiéndose del problema. Achicar, lo que para ellos es un “gasto” y no una inversión en el futuro de sus hijos, nuestros alumnos.
La educación pública, como la salud, es una conquista que nos quieren quitar.
Primero la abandonan a su suerte, desinvirtiéndola, tratando de que se naturalice que hay una educación de primera y una educación de tercera o cuarta.
Hacen esto porque no les interesa que sus hijos, nuestros alumnos, puedan apropiarse de un conocimiento científico, complejo, preparado para desarrollar una sociedad compleja. Eso se lo reservan para sus hijos, los hijos del poder.
Para los hijos de la clase trabajadora, sólo una educación que los prepare “para el mundo del trabajo” manual, incluso si lo encuentra, este será un trabajo cada vez más devaluado, precarizado, que es el tipo de trabajo que la economía global trae a nuestros países.
Y este ataque a la educación, también es mundial, tanto en los países desarrollados como en los periféricos, en Europa como en América, todos los países están aplicando estas recomendaciones de los organismos internacionales.
Un ataque a los trabajadores docentes es un ataque a todos los trabajadores
Desde varias administraciones, en eso no se diferenciaron los gobiernos que tuvimos, intentan atacar las conquistas laborales de los docentes. Bajos sueldos, sumas en negro en nuestros salarios, obligados a auto explotarnos trabajando muchas horas, tratando que seamos educadores, psicólogos, especialistas en salud reproductiva y en adicciones, entre otras tantas obligaciones.
Nosotros concebimos estos ataques como un ataque a todos los trabajadores, porque bajándonos el sueldo a los docentes y atacando nuestras condiciones laborales, quieren dar un ejemplo a nuestros alumnos y a sus padres.
Porque un ataque a los docentes que luchamos por defender la escuela pública, para que siga siendo gratuita, no religiosa y científica, es un ataque al pueblo trabajador y una de sus conquistas más valiosas.
La Educación Pública, algo muy importante para que la defendamos sólo los docentes
Consideramos que el operativo Aprender 2016, que quiere evaluar a nuestros alumnos, sus hijos, es un primer paso para clasificar las escuelas e instalar el ideario de una empresa que fabrica cosas, objetos, mercancías.
Y la escuela es y debe seguir siendo otra cosa.
De ella deben egresar sujetos capacitados intelectualmente para enfrentar un mundo complejo, para desarrollarlo y cambiar lo que consideren necesario del mismo.
Por eso a la escuela pública tenemos que defenderla entre todos, con unidad. Docentes, familias y estudiantes. Tenemos que juntarnos en las escuelas, en los barrios, para pensar cuáles son las mejores formas para defenderla y para que recupere e incluso supere el nivel que conoció en épocas anteriores.
Llamamos a toda la comunidad educativa a rechazar estos operativos evaluadores, que no buscan mejorar la educación, sino precarizarla y devaluarla y a pensar entre todos qué tipo de educación necesitan nuestros pibes para un país independiente y una sociedad más justa.
Las y los docentes de sus hijos.